PENADÉS HABÍA CREADO SU PROPIO GRUPO INVESTIGATIVO QUE TENÍA A CUATRO POLICÍAS Y SEIS HACKERS

Crónicas del Este 18/11/2023 Política

El exsenador del Partido Nacional, Gustavo Penadés, quien enfrenta cargos por 22 delitos de explotación sexual, intentó obtener la identidad de las víctimas denunciantes de diversas maneras. Su objetivo era elaborar una trama falsa para demostrar que existía un plan coordinado en su contra.
La estrategia del exlegislador y su defensa se vio obstaculizada cuando solo dos de los denunciantes, Romina Celeste Papasso y Jonathan Mastropierro, revelaron sus identidades. El resto de los datos permanecieron bajo reserva, según la decisión de la jueza Marcela Vargas, aceptando la solicitud de la Fiscalía.
A pesar de esto, Penadés logró avanzar en la creación de la trama al obtener información fuera de los límites legales. Esto llevó a centrar a Mastropierro como supuesto responsable de fabricar la causa para difamar la reputación del exsenador.
Las pericias telefónicas de la Fiscalía revelaron la implicación de personal policial en la obtención de información a través de sistemas estatales del Ministerio del Interior para identificar a las víctimas y establecer conexiones entre ellas. En medio de estas revelaciones, surgió el nombre de Carlos Taroco, exdirector del Comcar, como la persona que impartió órdenes para crear un diagrama presente en el celular de Penadés.
A pesar de las apariencias, la investigación demostró que Taroco no tuvo contacto directo con el exsenador, siendo un funcionario de carrera sin afiliación política conocida. Se sugiere la existencia de intermediarios, posiblemente del ámbito policial, entre Penadés y Taroco.
En el círculo colaborador de Penadés también se identificaron dos funcionarios de la Corte Electoral que, según la investigación, compartieron información de las víctimas, incluyendo datos personales.
Antes de la imputación de Penadés y el exdocente Sebastián Mauvezín, un grupo de hackers y policías se reunieron en el apartamento del exdirigente político para revisar la información recopilada de las víctimas. Los informáticos lograron descubrir vínculos comunes entre Papasso y Mastropierro a través de redes sociales, creando perfiles falsos en WhatsApp. Un exintegrante de la Fuerza Aérea Uruguaya, con experiencia en inteligencia, se presume que facilitó el contacto con Taroco para obtener información precisa.
A pesar de los intentos del grupo, las defensas de los acusados cometieron el "error" de hablar de una trama antes de asegurarse de su viabilidad. Según una fuente de la investigación, hubieran tenido más éxito si hubieran proporcionado explicaciones después de obtener la información necesaria.