EN PRIMARIA Y EDUCACIÓN INICIAL HAY 3.000 NIÑOS MENOS POR BAJA NATALIDAD, ES QUE NADIE QUIERE TENER HIJOS EN ESTE PAÍS

Crónicas del Este 16/03/2024 Editorial

Leandro Secinaro

En un país marcado por una rica historia cultural y una pasión por el fútbol, Uruguay se encuentra en una encrucijada demográfica que plantea serias interrogantes sobre su porvenir. Con la noticia de que hay 3,000 niños menos en Primaria y Educación Inicial en este 2024 en comparación con el año anterior, las autoridades no pueden ignorar la cruda realidad: la baja natalidad está llevando al país hacia un futuro incierto. Este descenso en la cantidad de niños en las aulas no es simplemente una estadística fría, es un síntoma de problemas más profundos que aquejan a la sociedad uruguaya. Uno de los factores clave detrás de esta preocupante tendencia es la situación económica del país. Uruguay, como muchas naciones en la región, enfrenta desafíos económicos persistentes que afectan la calidad de vida de sus ciudadanos. La falta de oportunidades laborales, los bajos salarios y la incertidumbre económica hacen que muchos jóvenes uruguayos vean el futuro con escepticismo. En un contexto donde alcanzar la estabilidad financiera parece una meta inalcanzable, la idea de traer hijos al mundo se vuelve cada vez más desalentadora. ¿Cómo pueden los jóvenes pensar en formar una familia cuando luchan por llegar a fin de mes? Pero la crisis económica no es el único obstáculo que enfrentan los uruguayos. La creciente inseguridad también ha dejado su huella en la sociedad. Con un promedio de un homicidio por día, según las estadísticas, el miedo se ha arraigado en las comunidades, generando un ambiente de desconfianza y temor. En un entorno donde la seguridad personal no está garantizada, es comprensible que muchos jóvenes duden en tener hijos y exponerlos a los riesgos inherentes a la vida en Uruguay. Además de los desafíos económicos y de seguridad, también es importante considerar el papel de las políticas gubernamentales en la baja natalidad. ¿Se están implementando medidas efectivas para apoyar a las familias y fomentar la maternidad y paternidad? ¿Se están abordando adecuadamente las preocupaciones de los jóvenes en materia de empleo y seguridad? Estas son preguntas cruciales que requieren respuestas concretas y acciones decididas por parte de las autoridades. Uruguay se enfrenta a una encrucijada demográfica que no puede ser ignorada. Si no se toman medidas urgentes para abordar los problemas económicos, sociales y de seguridad que afectan a la sociedad, el país corre el riesgo de ver un declive continuo en su población y un futuro cada vez más incierto. Es hora de que todos los sectores de la sociedad trabajen juntos para crear un entorno propicio que anime a los jóvenes a tener confianza en el futuro y a formar familias, garantizando así la continuidad y prosperidad de Uruguay.